En su libro “Y Jesús Lloró: Descubre el Poder del Liderazgo Compasivo”, Ángela Kohler presenta un modelo de liderazgo basado en la compasión, que identifica nueve competencias clave que los líderes compasivos deben desarrollar. En este blog, exploraremos estas competencias y cómo podemos aplicarlas en nuestra vida y trabajo para convertirnos en líderes más efectivos y contribuir al bienestar de los demás.

1.Autoconocimiento

El autoconocimiento es fundamental para el liderazgo compasivo. Un líder compasivo debe ser consciente de sus propias emociones, fortalezas y debilidades, y debe estar dispuesto a reflexionar sobre sí mismo y aprender de sus errores. Practicar la introspección y buscar feedback constructivo pueden ayudarnos a desarrollar esta competencia.
Empatía

2. La empatía es la habilidad de comprender y compartir los sentimientos y perspectivas de otras personas. Es la capacidad de

ponerse en el lugar de alguien más, comprender sus emociones y experiencias, y mostrar una genuina consideración por sus puntos de vista y necesidades. La empatía implica escuchar activamente, mostrar compasión y tener una actitud abierta hacia las experiencias de los demás.

3. Comunicación asertiva

Un líder compasivo debe ser capaz de comunicarse de manera clara, abierta y honesta. La comunicación efectiva implica ser un buen oyente, expresar nuestras ideas de manera coherente y utilizar un lenguaje inclusivo. Para mejorar nuestras habilidades de comunicación, podemos practicar la escucha activa, pedir feedback y adaptar nuestro estilo de comunicación a las necesidades de nuestro interlocutor.

4. Resolución de conflictos

Los líderes compasivos deben ser capaces de abordar y resolver conflictos de manera efectiva. Esto implica identificar las causas subyacentes del conflicto, facilitar el diálogo entre las partes involucradas y buscar soluciones que satisfagan las necesidades de todos. Podemos desarrollar esta competencia aprendiendo técnicas de resolución de conflictos y fomentando la colaboración en nuestro equipo.

5. Toma de decisiones éticas

Un líder compasivo debe tomar decisiones éticas y responsables, considerando el impacto de sus acciones en los demás y en el entorno. Esto implica evaluar las consecuencias a corto y largo plazo de nuestras decisiones y ser conscientes de nuestros valores y principios. Para mejorar en la toma de decisiones éticas, podemos reflexionar sobre nuestras experiencias pasadas, buscar asesoramiento y aprender sobre ética y responsabilidad social.

6. Inspirar y motivar a los demás

Los líderes compasivos deben ser capaces de inspirar y motivar a los demás para que alcancen su máximo potencial. Esto implica establecer metas claras y realistas, proporcionar apoyo y recursos, y reconocer y celebrar los logros de los demás. Para desarrollar esta competencia, podemos compartir nuestras historias de éxito y fracaso, reconocer públicamente los logros de los demás y ofrecer oportunidades de crecimiento y aprendizaje.

7. Adaptabilidad

La adaptabilidad es la capacidad de ajustarse a nuevas situaciones y desafíos. Los líderes compasivos deben ser capaces de adaptarse a las circunstancias cambiantes y estar abiertos a nuevas ideas y enfoques. Desarrollar nuestra adaptabilidad implica estar dispuestos a aprender de nuestras experiencias, aceptar la incertidumbre y ser flexibles en nuestra forma de pensar y actuar.

8. Colaboración

La colaboración es esencial en el liderazgo compasivo. Un líder compasivo debe ser capaz de trabajar en equipo, fomentar la cooperación y crear un ambiente en el que todos se sientan valorados y escuchados. Podemos mejorar nuestras habilidades de colaboración al establecer metas compartidas, promover la comunicación abierta y crear un entorno de confianza y respeto.

El liderazgo compasivo es un enfoque poderoso y transformador que puede mejorar nuestras organizaciones, carreras y vidas. Al desarrollar y aplicar estas nueve competencias, podemos convertirnos en líderes más efectivos y contribuir al bienestar de los demás. Recordemos que, como dijo Mahatma Gandhi, “la verdadera medida de un líder no se encuentra en cuánto poder tiene, sino en cuánto cuidado muestra por los demás”.